Noticias Telemundo
Su familia ha pedido justicia, mientras miles de personas han salido a las calles del país en protesta por la brutalidad policial. Los oficiales involucrados en la agresión, despedidos del departamento de policía, están detenidos y fueron acusados el jueves de asesinato. El presidente Joe Biden condenó la agresión y reconoció la valentía de los familiares de Nichols, a quienes ofreció sus condolencias, informó la Casa Blanca.
Estos son los cinco momentos que resumen la brutalidad policial registrada en los videos:
1. “No hice nada”: Nichols es detenido y sacado a rastras fuera de su vehículo
Los videos arrancan a las 08:23 p.m. desde el interior de las patrullas policiales. Un minuto después, los oficiales rodean un vehículo estacionado en un semáforo. Dentro del automóvil está Nichols. Los agentes bajan armados, mientras uno de ellos abre la puerta del carro y saca a rastras al joven fuera.
“No he hecho nada”, grita Nichols. “Solo estoy tratando de ir a casa”, repite.
El joven, que según su familia regresaba de tomar fotos al aire libre y fue detenido cerca de donde vive su madre, trata de cooperar con los oficiales que se muestran ofuscados.
“Tírate al suelo”, le grita un agente, mientras se oye a otro decir: “¡Ponle la pistola! Ponle la pistola”, refiriéndose al taser o arma de electrochoque.
“De acuerdo, estoy en el suelo”, responde Nichols, quien trata de hacerles entrar en razón. “Hombre, estoy en el suelo”, insiste, mientras señala en que la respuesta de los policías es desproporcionada. “Realmente están exagerando en este momento”, reclama. “Solo intento irme a casa”.
2. La persecución
Tras dos minutos de forcejeo, Nichols logra escabullirse de los oficiales, quienes le apuntan y disparan con el taser para detenerlo. El joven corre, mientras los agentes lo persiguen.
Las imágenes disponibles muestran a los policías regresar agitados a sus vehículos porque no pudieron alcanzarlo. Toman agua y jadean por el cansancio. La agresión se reanuda un par de minutos después, cuando Nichols es alcanzado por otros oficiales en una calle.
3. “¡Mamá! ¡Mamá! ¡Mamá!”: patadas, puñetazos, gas y macanazos
La persecución no queda registrada en su totalidad en los videos publicados. Hay fragmentos desde distintas perspectivas que no exhiben el panorama completo. A las 08:32 p.m. Nichols aparece, ya en el suelo, sostenido por dos oficiales. Otro le rocía el rostro con spray. Entre todos comienzan a golpearlo.
El joven, angustiado, se limpia la cara y grita desesperado varias veces, llamando a su madre: “¡Mamá! ¡Mamá! ¡Mamá!”.
Mientras dos oficiales lo sostienen en el piso, otro lo patea en el abdomen y la cara. Una y otra vez. Luego aparece un cuarto policía, que saca un bastón o macana con el que comienza a agredirlo.
“Dame las m——- manos”, le gritan. “Dame las m——- manos”, le repiten. “Está bien”, murmura Nichols que ya no grita, ni se resiste. Está controlado en el suelo, sin forcejear con los oficiales.
4. “Siéntate hermano”: llegan refuerzos y la atención médica se demora
En los minutos siguientes se percibe el caos tras la golpiza. Un oficial se detiene a atarse lo zapatos, otro exhala cansado tras golpear al joven. Todos lucen agitados.
En las imágenes, Nichols ya no se mueve y se le ve recostado junto a un vehículo, atado de manos.
Los agentes platican y tratan de recobrar el aliento. Un policía le alumbra el rostro al joven, que está ensangrentado. Mientras conversan, Nichols cae de lado al suelo. “Siéntate hermano”, le dice un oficial. “Siéntate hermano”, repite. Lo toma de un brazo y lo levanta del piso.
Nichols trata de decir algo que resulta incomprensible.
5. “Él corrió, es su m—— culpa”
En los minutos finales de las grabaciones aparecen más de 10 oficiales en el sitio.
Nichols no es atendido por personal médico hasta las 08:42 p.m. “No puedes ir a ninguna parte”, le dice una de las personas que trata de asistirlo, mientras el joven se retuerce en el suelo y murmura algo inaudible.
Una cámara corporal registró el momento en el que un agente camina de un lado al otro, visiblemente agitado. Por momentos recuesta la cabeza sobre un vehículo y respira rápidamente.
En la grabación, se ve a los oficiales que observan a Nichols ser atendido. “Él corrió, es su m—— culpa”, se escucha decir a uno de ellos, justificando la golpiza.
Otro de los agentes que detuvo al joven trata de explicar a quienes acaban de llegar que todo empezó por una infracción de tráfico, que intentaron detenerlo y que él no atendió a las sirenas ni a la señales cuando le pedían que se estacionara.
Incluso dice que trató de chocarlos con su vehículo. El Departamento de Policía de Memphis afirmó que no ha podido comprobar qué sucedió antes de lo que se ve en las imágenes que ahora son públicas.
Las grabaciones con cámara corporal difundidas tampoco enseñan cuándo llegó la ambulancia, momento recogido por una cámara de seguridad en la calle a las 09:01 p.m. Habían transcurrido más de 20 minutos desde que terminó la golpiza. Se desconoce en qué momento fue trasladado Nichols al hospital, donde murió tres días después.
