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Tres sospechosos fueron arrestados por su supuesta vinculación con el camión con 53 migrantes muertos que fue encontrado abandonado en una carretera cercana a San Antonio, Texas.
Los arrestados son el conductor, identificado como Homero Zamorano, el conductor, y dos inmigrantes indocumentados que fueron acusados de posesión ilegal de armas: Juan Francisco D’Luna Bilbao y Claudio D’Luna Méndez.
Según medios locales, el conductor, de 45 años, es un ciudadano estadounidense que fue hallado cerca del lugar en que había abandonado el camión con los migrantes. Unas fuentes dicen que supuestamente estaba tratando de hacerse pasar por una de las víctimas y otras que estaba tratando de huir.
“Estaba muy drogado con metanfetaminas cuando lo arrestamos allí cerca, y hubo que llevarlo al hospital”, dijo un agente policial citado por el San Antonio Express News.
Zamorano, que tiene un largo historial criminal, pasó la noche del martes hospitalizado y se esperaba que fuera presentado este mismo miércoles ante un tribunal federal.
Los otros dos sospechosos fueron arrestados después de que los investigadores pusieran bajo vigilancia un domicilio al que llegaron a partir de los datos de registro del camión.
De allí salieron los D’Luna, a los que detuvieron en posesión de armas de fuego mientras residían ilegalmente en el país. No fue inicialmente aclarado por las autoridades que además hubieran sido imputados por la muerte de los migrantes.
El camión con migrantes muertos cruzó la frontera por Laredo
El representante Henry Cuéllar le dijo a AP que el camión había cruzado desde México por un punto de control de la Patrulla Fronteriza ubicado al noreste de Laredo, en la Interstatal 35.
Cuéllar, sin embargo, desconocía si los migrantes estaban ya en el camión o entraron al país por su cuenta y se subieron ya en Estados Unidos, como suele ser la forma de operar de las mafias traficantes de personas.
Felipe Betancourt Jr. de la empresa transportista Betancourt Trucking and Harvesting, que aparece rotulada en el camión rojo donde fueron hallados los inmigrantes, asegura que le clonaron el vehículo e insistió en descartar conexión alguna con la tragedia.
En entrevista con Univision San Antonio, Betancourt dice que aunque tiene el mismo color y coinciden los números de identificación del Departamento de Transporte federal y el Departamento de Transporte de Texas, no es el suyo por los números de placas.
A cargo del caso está la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI), que hace parte del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Craig Larrabee, de HSI, le dijo a AP que las autoridedes descubren migrantes ocultos en camiones en el sur de Texas casi a diario. Según Larrabee, los migrantes pagan, normalmente, entre $8,000 y $10,000 por ser guiados a través de la frontera y ya en Estados Unidos son llevados en un trailer hasta San Antonio, donde pasan a vehículos más pequeños en los que van a su destino.
San Antonio resulta un lugar estratégico para este tipo operaciones por su cercanía a la frontera y buenas comunicaciones por carreteras. Por allí pasan la I35, que llega hasta Canadá, y la I10, que cruza el país de costa a costa, desde Los Ángeles, Califronia, a Jacksonville, Florida.
