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AP News
WASHINGTON (AP) — Ha pasado más de una década desde que el presidente Barack Obama y su esposa, Michelle, dieron la bienvenida a George W. Bush y a su esposa, Laura, para develar sus retratos en la Casa Blanca, parte de una querida tradición de Washington que décadas lograron trascender la política partidista.
El presidente Joe Biden y su esposa, Jill, están listos para revivir ese ritual, después de una brecha incómoda y anómala en los años de Trump, cuando reciban a los Obama el miércoles para la gran revelación de sus retratos frente a decenas de amigos, familiares y personal.
Las pinturas de Obama no se parecerán a ninguna de la colección de retratos de la Casa Blanca a la que se agregarán. Fueron el primer presidente negro y la primera dama de Estados Unidos.
La ceremonia también marcará la primera visita de Michelle Obama a la Casa Blanca desde que terminó la presidencia de Obama en enero de 2017, y solo la segunda visita de Barack Obama. Estuvo en la Casa Blanca en abril para conmemorar el 12° aniversario de la ley de salud que firmó en 2010.

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