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SACRAMENTO, Calif. (AP) – Algunos legisladores de California están pidiendo al gobernador Gavin Newsom que deje de cooperar con las autoridades federales de inmigración que buscan deportar a los reclusos de las prisiones estatales. California tiene una ley estatal que prohíbe a las autoridades locales cooperar con las autoridades federales de inmigración en algunos delitos.
Pero no se aplica al sistema penitenciario estatal. El jueves, defensores de la inmigración destacaron el caso de Bounchan Keola, un inmigrante de Laos de 39 años que trabajó como bombero mientras estaba en prisión. Cuando fue liberado en octubre, fue transferido a la custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas. Un juez federal ordenó su deportación. Keola dijo a los periodistas que solo quiere una segunda oportunidad.
