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«La inflación ha sido un problema mundial debido a la pandemia que interrumpió las cadenas de suministro y la guerra de Putin que interrumpió el suministro de energía y alimentos», dijo el presidente.
Pero, «la inflación ha caído todos los meses durante los últimos seis meses, mientras que el salario neto ha aumentado», añadió.
¿Qué tan cierto es lo que dice Biden?
Es verdad que la inflación interanual lleva seis meses en caída: enero cerró con 6.5%, tras alcanzar en junio un máximo de cuatro décadas y situarse en 9.1%; en noviembre estaba en el 7.1%.
Pero también es cierto que la inflación sigue siendo obstinadamente alta, especialmente si se compara con enero del 2021, cuando Biden llegó a la Casa Blanca y el índice registraba 1.2%.
Por ejemplo, hoy el precio promedio de un galón de leche en EE.UU. es de 4.2 dólares, casi un dólar más que al inicio de la Administración Biden.
El precio de los huevos también es el más alto en décadas, en parte de los consumidores han aumentaron su consumo porque dejan de comprar proteínas más costosas debido a la inflación.
El presidente le pide a los republicanos que lo ayuden a “restaurar el alma de la nación”
Biden se dirigió directamente a los republicanos el martes por la noche, pidiéndoles que trabajen con él en los esfuerzos que ayudarán a «reconstruir» la clase media y «restaurar el alma de la nación».
«A mis amigos republicanos, si pudimos trabajar juntos en el último Congreso, no hay razones para que no podamos trabajar juntos en este nuevo Congreso», dijo Biden durante su alocución.
«Luchar por luchar, el poder por el poder, el conflicto por el conflicto, son cosas que no nos llevan a ninguna parte. Y esa siempre ha sido mi visión para el país: restaurar el alma de la nación, reconstruir la columna vertebral de Estados Unidos: la clase media, unir al país», dijo el mandatario.
Biden presume del mayor crecimiento del empleo en una presidencia, pero excluye algunos datos
El presidente Biden, destacó los avances en la recuperación económica de la pandemia, incluida una robusta creación de empleos (más de 12 millones) que calificó como la mayor en toda la historia del país para los primeros dos años de una presidencia.
«Ya hemos creado 800,000 empleos manufactureros bien pagados, la mayor tasa de la historia», declaró.
Revisamos su afirmación:
En cifras brutas, Biden sí ha visto un mayor crecimiento del empleo en sus primeros dos años que durante el primer mandato de cualquier otro presidente posterior a la Segunda Guerra Mundial.
Pero esa cifra excluye importante información de contexto, como el crecimiento de la población y por ende de la fuerza laboral: entre más personas, más trabajos.
Además, Biden compara la creación de empleos en un período de dos años con el primer término presidencial de cuatro años de los demás presidentes. Un número más exacto para medir el desempeño de Biden sería el aumento porcentual del empleo. Si lo medimos así, otros presidentes como Lyndon B. Johnson, Ronald Reagan y Bill Clinton, vieron un mayor crecimiento del empleo que el registrado por Biden en sus dos primeros años.
¿Este Gobierno logró la mayor reducción del déficit de la historia, como dice Biden?
“En los últimos dos años, mi Administración redujo el déficit en más de 1,700 billones de dólares, la mayor reducción del déficit en la historia de Estados Unidos», afirmó el presidente en su discurso. ¿Esto es correcto?
Falta contexto.
Efectivamente, el déficit federal se redujo 1,700 billones de dólares, de 2,755 billones en 2021 a 1,036 billones en 2022, la mayor disminución anual en la historia.
Pero ese hecho necesita contexto, dado las circunstancias extraordinarias que lo precedieron.
El déficit aumentó porque el gasto federal se disparó entre 2019 y 2021 debido a que las administraciones de Trump y Biden intentaban aliviar el golpe económico de una pandemia global que no se había visto en al menos un siglo. Comparar la reducción con años anteriores no es precisamente una comparación de manzanas con manzanas.
