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Durante la tormenta severa más reciente, el departamento de Obras Públicas del Condado de San Luis Obispo recibió más de 1,100 llamadas de primeros auxilios y residentes que informaron de daños. Las tormentas provocaron más de 60 cierres de carreteras, pero la mayoría de esas carreteras ya han sido reabiertas.
Respondieron a cada llamada y ahora estan en modo de limpieza, dando prioridad a las reparaciones basadas en la gravedad del impacto para los residentes. La primera prioridad de la reparación fue restablecer el acceso a las comunidades aisladas donde los residentes habían quedado varados en sus hogares. La segunda prioridad de la reparación es abrir rutas clave que reduzcan los tiempos de desvío a los hogares y las empresas.
Simultáneamente, estan limpiando alcantarillas, barro y rocas como lo hicieron durante cada tormenta para mantener las carreteras libres para viajar; estan inspeccionando puentes y carreteras en todo el condado para garantizar la seguridad.
En el North County, por ejemplo, Cripple Creek Road actualmente tiene reparaciones en progreso. El puente Creston Road estaba arruinado y tendrá que ser reconstruido, pero la destrucción fue mucho más allá del puente. La falla de más de 100 pies de pendiente que se acerca al puente es tan problema como el propio puente.
Al menos 20-30 pies de terraplén fue aniquilado por el arroyo creciente dejando el borde de la carretera pavimentada en el precipicio de una caída de más de 20 pies.
Tanto el puente como la carretera necesitan evaluación y estrategia antes de que sean reconstruidos.
Esto va a llevar algo de tiempo evaluar y elaborar una estrategia, pero Obras Públicas están totalmente invertidas en reparar la infraestructura que la naturaleza destruyó.
Lamentamos las dificultades que han causado los residentes y las empresas las carreteras afectadas. Y aprecian todos los mensajes de gratitud y espíritu de ayuda que hemos recibido de residentes de todo el condado.
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