Univision Noticias
El Buró Federal de Investigaciones (FBI) está pidiendo ayuda al público para localizar a una mexicana con ciudadanía estadounidense que fue secuestrada hace un mes en el suroeste de México.
María del Carmen López, de 63 años, fue raptada el pasado 9 de febrero cuando se encontraba en su casa en Pueblo Nuevo, en el municipio de Villa de Álvarez, en el estado de Colima.
No está claro si han pedido un rescate a sus seres queridos.
Colima es considerado uno de los estados más peligrosos de México, por una guerra encabezada por el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Pelea sobre todo el control del puerto de Manzanillo, uno de los más grandes del país y en donde recibe precursores químicos de Asia que usa para fabricar drogas sintéticas, como el fentanilo y la metanfetamina.
La capital del estado, que lleva el mismo nombre, ha sido catalogada como la ciudad más violenta del mundo, por una tasa de 181.94 homicidios por cada 100,000 habitantes, según cifras del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal de México.
La casa en donde López fue secuestrada se localiza en la zona metropolitana de Colima.
Tres estadounidenses han sido asesinados en Colima y Manzanillo en los últimos cinco años, de acuerdo con la base de datos del Departamento de Estado de EEUU.
El caso Matamoros
El FBI divulga este incidente una semana después del hallazgo de los cadáveres de dos de los cuatro turistas estadounidenses que fueron secuestrados en la ciudad fronteriza de Matamoros, Tamaulipas.
Las autoridades han arrestado y procesado legalmente a seis personas por los delitos de secuestro agravado y homicidio simple intencional.
El viernes 3 de marzo, cuatro estadounidenses cruzaron a Matamoros desde Texas para que una mujer del grupo pudiera hacerse una cirugía estética. Alrededor del mediodía fueron baleados en el centro de esa ciudad y luego subidos a una camioneta.
El hecho generó una intensa búsqueda, en la cual participaron agentes del FBI.
Una supuesta carta, que dice provenir de una facción del Cartel del Golfo, condenaba el acto y decía que el grupo había entregado a las autoridades a sus propios miembros responsables del hecho.
La investigación inicial arroja que estos traficantes se confundieron al atacar a los turistas.
Varios estadounidenses han sido víctimas de ese delito en México y algunos fueron asesinados a pesar de que sus familiares pagaron un rescate, de acuerdo con documentos judiciales.
En uno de los sucesos más recientes, una banda criminal secuestró y mató a joven de 19 años en Tijuana, Baja California, en mayo de 2020.
Ensangrentado, el muchacho fue mostrado a sus familiares en California, en una videollamada por Facebook. A pesar del avance de las negociaciones, los captores decidieron quitarle la vida.
Otro ciudadano de Estados Unidos que al parecer fue asesinado por el crimen organizado en México es Jesús Eduardo Paez López, originario de Los Ángeles, California.
Varios hombres armados se lo llevaron de una casa en El Roble, Sinaloa, durante la madrugada del 4 de enero de 2020, según el FBI.
En septiembre de ese año, la agencia ofreció una recompensa de $10,000 por información que ayudara a rescatarlo. Pero, en enero de 202, se habían perdido las esperanzas de encontrarlo con vida.
Más de 220 homicidios de estadounidenses han ocurrido en México desde diciembre de 2018, cuando inició el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador. La mayoría perdió la vida en zonas fronterizas controladas por violentos carteles de la droga, incluyendo el estado de Colima.
